Tod@s sabemos que hay manchas y MANCHAS y, por eso, a veces cuesta más limpiar unas que otras. El problema es que hay que saber diferenciar cuándo merece la pena el trabajo y cuando no porque, aunque te lo pinten muy fácil, hay manchas que no saltan ni a tiros. Hoy vamos a diferenciar aquellas manchas difíciles para las que existen trucos de limpieza efectivos de esos otros casos donde las manchas han llegado para quedarse, y sólo un profesional (a veces ni eso) consigue eliminarlas de la ropa.