La vida actual de prisas, la complicada situación laboral de los trabajadores y las empresas, la conciliación de la vida familiar y laboral, los problemas familiares…, todo esto nos puede acarrear importantes situaciones de estrés o ansiedad, que nos hagan buscar la ayuda de un profesional y también la de terapias psicológicas. Hace un par de años yo sufrí todo esto por culpa de un cambio obligado de trabajo. Mi empresa me movía a otro puesto donde tenía un compañero que me ponía chinas en los zapatos y que, para colmo, siempre era un entendido en la materia de nuestro trabajo pese a no haberse formado para él.
El hecho de coger el coche para ir a trabajar me producía ansiedad, por lo que acudí a al gabinete de psicología y terapia Psi, situado en Barcelona, y que cuenta con un equipo de psicólogos dotados de una amplia experiencia que nos ayudan tanto a superar situaciones difíciles como a gestionar las emociones, mejorar la autoestima y encontrar el equilibrio psicológico con el fin de lograr una vida plena y unas relaciones sanas. Con su ayuda, y una terapia de relajación que hice a través de aguas termales, logré el equilibro y que nada de esto me afectase.
Y es que si lo que buscamos es paz y relajación para rebajar nuestro nivel de estrés o ansiedad podemos complementar la ayuda profesional con la que la naturaleza nos ofrece en forma de aguas termales o agua termal minero medicinal. Los beneficios que a nuestra salud aporta son múltiples, entre ellos podemos destacar:
- Efecto relajante. Las altas temperaturas de estas aguas tienen un efecto terapéutico sobre la musculatura, aun estando en reposo el agua ejerce una presión sobre el cuerpo, lo que hace la función de un suave masaje, si a esto se le añade el agua en movimiento, o sea un baño de burbujas, la función sobre el cuerpo de multiplica produciendo un masaje profundo que es relajante, tonifica la musculatura, favorece y activa la circulación sanguínea puesto que el corazón late más deprisa y bombea más sangre…
- Mejora las enfermedades de la piel. Sobre todo si estas contienen entre su composición mineral un alto porcentaje de azufre, entre ellas la psoriasis, la dermatitis y las enfermedades causadas por hongos. Además son muy beneficiosas para curar heridas y lesiones de la piel.
- Ayuda a depurar la sangre y eliminar toxinas a través de la diuresis y la sudoración.
- Elimina secreciones y despejan las vías respiratorias altas y bajas.
- Disminuye las inflamaciones crónicas, las contracturas y rigideces neuromusculares, así como los dolores óseos y de articulaciones.
- Estimula las defensas del organismo.
Complemento a la terapia psicológica
Está claro que las aguas termales por sí solas no completarán el proceso de recuperación de una persona que siente ansiedad, miedos o angustia, pero sí ayudan. Lo mejor, como os decía más arriba, es completar este tratamiento acudiendo a un especialista en psicología que nos ayude. En mi caso, aposté por Terapia Psi, un gabinete especializado en la terapia Gestalt.
En Psi atienden bajo las directrices de esta terapia tanto problemas de índole individual, como de pareja, o psicología Infantil, podemos ayudarte. Te ayudan a lograr una orientación en la vida, superar situaciones difíciles y gestionar tus emociones, para aprender de ellas. Para mejorar tu bienestar, autoestima y equilibrio psicológico. Y todo con unos excelentes resultados entre sus pacientes y con un grupo de profesionales que está dirigido por la psicóloga Mª Laura Fernández, especializados en terapia Gestalt, con una amplia experiencia en la formación, tratamiento y acompañamiento a personas, para ayudar a los pacientes en los distintos aspectos de su vida: situaciones personales y cuestiones del propio carácter, problemas de pareja u otras relaciones, asuntos referentes al ámbito profesional.