Antes de nada, vamos a analizar el título de este post porque tiene fondo y hay que entender muy bien a qué nos referimos con eso de abandonar el azúcar en nuestra dieta. Lógicamente, no nos referimos ni a la fructosa de la fruta ni a la azúcar que podemos encontrar en ciertos productos naturales, o procesados sanos, sino a esas cantidades de azúcar industriales que ponen las fábricas a ciertos productos ultraprocesados de dudosa calidad y que todos hemos consumido alguna vez en nuestra vida.