El papel pintado es tendencia en decoración. Muchos decoradores y usuarios recurren a este sistema tradicional para personalizar las viviendas, dándole un aire fresco y original. Si bien, su uso dista del que se le daba en otras épocas.
El papel pintado se coloca sobre las paredes con cola, cubriendo las imperfecciones y permitiendo un acabado más rápido que con la mayoría de las pinturas. Lo que lo convierte en uno de los productos preferidos por los profesionales.
Parecía que el papel pintado era cosa de otros tiempos, que había caído en desuso. Sin embargo, los responsables de Briconeo, una tienda online de productos para el bricolaje y la decoración, señalan que su venta no ha parado de crecer en los últimos años.
Era el rey de la decoración en los años 60 y 70. Puede ser que lo hayamos visto en fotografías de aquella época o, que incluso, los que tenemos más edad, nos acordemos de cómo estaba presente en las alcobas y salones de la casa de nuestros abuelos.
Con el papel pintado se cubrían todas las paredes. Se empleaban diseños estampados con motivos geométricos que creaban un ambiente casi psicodélico. En las habitaciones infantiles era la solución decorativa más utilizada. Las paredes de las alcobas de los niños estaban cubiertas con un papel de un color suave (blanco, rosa, azul) con dibujitos de figuras que se repetían contantemente. Era divertido observar donde terminaba una tira de papel y comenzaba otra, pues se apreciaba un salto en la disposición de los dibujos.
Con el tiempo, el papel pintado fue sustituido por completo por la pintura. Era un método más higiénico. En algunas casas se iban acumulando las capas de papel pintado, unas sobre las otras, llegándose a abombar con el paso de los años, debido a que la cola dejaba de hacer efecto. Al mismo tiempo, permitía que proliferara la humedad y la concentración de gérmenes.
El uso y el tipo de papel pintado que se emplea actualmente son distintos a los que se usaban antes. Para empezar, hay una mejor calidad y variedad en cuanto a los diseños y los materiales. Por otro lado, ya no se tiende a empapelar todas las paredes de una casa, sino que se alterna con la pintura para crear espacios más acogedores.
Estas son algunas razones que han propiciado la vuelta del papel pintado.
¿Por qué se demanda el papel pintado?
La Escuela Madrileña de Decoración señala que el papel pintado aporta a los espacios un aire vanguardista, genera calidez y crea espacios llenos de vida y personalidad.
En los últimos tiempos se ha impuesto en la decoración el estilo escandinavo, basado en el minimalismo. Pintar las paredes de un solo color, generalmente blanco o de un tono neutro, con una reducción en cuanto a los muebles y a los elementos decorativos. Llevando la decoración casi a su mínima expresión.
En cierto modo, la vuelta del papel pintado es una reacción a ese estilo simplista y a veces aséptico. El abuso del minimalismo hacía que todas las casas se parecieran entre sí. Más aún, que una casa se pareciera a la sala de espera de una clínica dental o al despacho de un abogado. Se había eliminado cuál rastro de individualidad y personalización.
El papel pintado viene a romper esta tendencia. Con él podemos impregnar las paredes de nuestra casa con motivos vegetales, geométricos u obtener una mezcla de texturas y tonos difícil de conseguir con la pintura.
Con los nuevos materiales, limpiables y resistentes al agua, podemos incluso empapelar las paredes de baños y cocinas. Algo que no se podía hacer en otros tiempos.
Tiene, además, una cualidad que lo hace compatible con los tiempos que vivimos. Es una solución decorativa económica, que no necesita obras para aplicarla y que la puedes poner tú mismo. En la mañana de un sábado puedes cambiar por completo la apariencia de tu hogar.
Ventajas del papel pintado.
Para comprender mejor por qué ha regresado este recurso decorativo, nada mejor que detenernos a evaluar sus ventajas. Estas son las más reseñables:
- Variedad de diseños:
El papel pintado ofrece una amplia gama de diseños, desde patrones clásicos hasta opciones modernas y personalizables. Esto permite a los propietarios encontrar el estilo perfecto para complementar su decoración.
- Texturas y efectos visuales:
Muchos papeles pintados ofrecen texturas y efectos visuales que pueden añadir profundidad a una habitación. Desde acabados tridimensionales hasta imitaciones de materiales como madera o ladrillo. El papel pintado puede transformar una pared básica en una obra de arte visual.
- Fácil instalación:
En comparación con otras opciones de revestimiento de paredes, el papel pintado es relativamente fácil de instalar. Además, las tecnologías modernas han mejorado la capacidad de retirar el papel pintado sin dañar las paredes, lo que lo convierte en una opción práctica y versátil.
- Cubre imperfecciones:
Es papel una solución eficaz para cubrir pequeñas imperfecciones en las paredes, como grietas o irregularidades. Proporciona una superficie uniforme y atractiva, creando una apariencia más pulida.
- Personalización:
Permite a los propietarios expresar su estilo personal y su creatividad. Algunos papeles pintados son incluso personalizables, lo que brinda la oportunidad de crear un diseño único que se adapte perfectamente a la visión del hogar.
- Durabilidad y resistencia:
Los avances en tecnología han mejorado la durabilidad del papel pintado, haciéndolo más resistente a la decoloración y a daños causados por la humedad. Esto lo convierte en una opción duradera para espacios transitados.
- Solución económica:
En comparación con otras opciones de revestimiento de paredes, el papel pintado puede ser una solución más económica. Esto permite a los propietarios lograr un impacto decorativo significativo sin gastar mucho dinero.
- Facilita los cambios temporales:
Es ideal para aquellos que disfrutan cambiando la decoración de su hogar con regularidad. El papel pintado facilita actualizaciones temporales y cambios en el estilo sin una renovación completa.
Algunas diferencias con la pintura.
Cabe destacar que el papel pintado es una opción versátil y combinable. De hecho, puedes tener pintadas las paredes de un salón y dejar una de ellas cubierta con papel pintado, creando un efecto visual sugerente.
Aun así, vamos a detenernos en algunas diferencias que presenta el papel pintado con respecto a la pintura de interiores. Su principal alternativa.
- Aplicación: La aplicación de papel pintado y la pintura difiere significativamente. Mientras que la pintura se aplica directamente sobre la pared, el papel pintado implica una instalación más detallada. Requiere la preparación de la superficie, la aplicación de adhesivo y la colocación cuidadosa del papel. La pintura puede parecer más sencilla, pero la colocación del papel suele ser más rápida.
- Tiempo de Secado: El tiempo de secado también varía entre ambas opciones. La pintura de interiores generalmente se seca más rápido que el papel pintado. Mientras que la pintura puede estar lista en cuestión de horas, el papel pintado a menudo requiere más tiempo para el secado del adhesivo y para que se asiente completamente. Por otro lado, cabe señalar, que el papel pintado se coloca directamente, mientras que con la pintura deberemos aplicar varias manos, respetando su tiempo de secado.
- Acabado y textura: El acabado y la textura son diferentes. La pintura proporciona una superficie uniforme y suave, mientras que el papel pintado puede agregar textura y profundidad a una pared. La variedad de diseños y texturas disponibles en el papel pintado supera a las opciones de pintura, permitiendo una mayor personalización y estilo en la decoración.
Ideas de decoración.
La revista de decoración Mi Casa presenta varias opciones, algunas bastante curiosas, en las que utilizar el papel pintado. De aquí puedes sacar ideas interesantes.
Algo que me ha llamado mucho la atención, es la posibilidad de empapelar las paredes de un baño o de una cocina, dándole un aspecto completamente diferente. Lo normal ha sido siempre revestir la pared de estas dependencias con azulejos. Por el uso, las paredes de la cocina se suelen llenar de grasa y las del baño debemos desinfectarlas para tener un ambiente higiénico. Los papeles pintados, diseñados para cocinas y baños, están plastificados y tratados específicamente. Lo que permite que se puedan limpiar con los productos de limpieza que usamos en casa, sin que se deteriore el diseño.
Esto permite, por ejemplo, que a las paredes de nuestra cocina le podamos dar un aire primaveral o vegetal, saliendo de la monotonía de las paredes cerámicas monocolor.
En cuanto a la decoración de las habitaciones infantiles, el papel pintado continúa siendo nuestro aliado. Ya no se trata de empapelar las cuatro paredes con pequeños dibujitos de Mickey Mousse que se repiten constantemente y que llegan a marear al niño. Podemos colocar detalles de papel pintado en la pared, con forma de casita o de puerta, que incentivan la imaginación del niño y contribuyen a crear un ambiente mágico.
El papel pintado lo podemos emplear, solo o combinándolo con otros elementos, en salones, comedores, despachos. Las opciones son prácticamente infinitas. Precisamente, esta versatilidad ha influido en que el papel pintado regrese a nuestros hogares.